La luces danzando al alrededor, la música a todo volumen, la personas moviendo se frenéticas. Así era el habiente de la discoteca, el lugar perfecto para ligar o tener una muy acalorada sección de besos calientes en una esquina presos de la lujuria y el calor del habiente.
Esto era los pensamientos de un joven pelirrojo, que se encontraba observando el lugar en busca de la persona que lo había citado a ese lugar. Cuando por fin vio a los lejos a la persona, se podía observar como este se acercaba a su ubicación dando pequeño golpes de cadera al son de la música se escuchaba en la disco, hasta que alfil llego a su lado.
-Gracias por haber acudido a mi llamado-Dijo un chico rubio de ojos azule, con tres marquitas en la cara que parecían bigotes y que le daban un aire de inocencia como la de un niño pequeño.
-No hay de que, pero que era eso tan importante que mencionaste por teléfono-Pregunto el pelirrojo de ojos aguamarina.
-Pues eso no te lo puedo decir aquí, así que por que no vamos a otro lugar-Dijo el rubio con un aire de misterio.
Después de haber dicho esto el rubio empezó a caminar con dirección a la salida siendo seguido muy de cerca por el pelirrojo. Lo que esto no sabía era que eran observados por tres pares de ojos que se nota una como crecía su ira al ver como el rubio y el pelirrojo salían muy juntos de la disco.
-Ustedes quien creen que sea ese pelirrojo que tiene las agalla de acercarse a nuestro Naruto-Dijo un pelinegro de cabello corto a sus acompañantes que si no fuera por el corte de pelo los tres parecerían trillizos.
-Pues no tengo ni la mas mínima idea de quien será, pero lo que si estoy seguro que cuando es que cuando lo atrape lo are trisas-Dijo el otro pelinegro con la única diferencia era que este tenia el cabello mas largo y en la punta estaban un poco alzadas como púas
-Yo sugiero que lo sigamos para ver que asen-Dijo el otro pelinegro con la única diferencia de tenia el cabello largo amarado en una coleta.
Los otros estuvieron de acuerdo con lo dicho por el mayor de ellos, así que se levantaron de la mesa y se dirigieron a la salida. Pero al momento de llegar afuera del la disco, no encontraron a la persona que buscaban por ningún lado.
En otro lugar mas específicamente en un Ferrari de color rojo se encontraba un pelirrojo y un rubio de los mas tranquilo mientras se dirigían a la casa del primero, para poder hablar con mas tranquilidad.
-Buenos, hemos llegado-Dijo el pelirrojo cuando ya avían cruzado el portón d hierro de su casa.
-Cuanto tiempo si haber venido-Dijo el rubio con un tono de nostalgia.
-Bueno eso es por que tu te as olvidado de visitarnos Naruto-Dijo una persona que se encontraba en ese momento en el umbral de la puerta de entrada.
-Deidara, cuanto tiempo si verte-Dijo Naruto con una gran sonrisa de alegría en la cara.
-Bueno, no novamos a quedar aquí afuera charlando-Dijo el pelirrojo al ver que ninguno de los dos rubios pensaba moverse.
-Ok, Gaara-Dijeron Naruto y Deidara al mismo tiempo.
Ya después de que habían entrado a la casa, se fuero al salón mientras Deidara iba a la cocina a prepara un poco de té.
-Bueno, ya puedes decirme cual era es asunto tan importante-Dijo Gaara, después de que Deidara regresara de la cocina.
-Bueno…
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